Oración para antes de un examen

Oración para antes de un examen

Dios Todopoderoso

Oh Dios, Padre celestial, en este momento de angustia y prueba, acudo a Ti con humildad y reverencia. Tú que conoces los secretos de mi corazón y sabes de mis debilidades, te ruego que me acompañes en este examen que he de enfrentar. En tu infinita misericordia, extiende tu mano protectora sobre mí y guía mis pasos en este desafío que se presenta ante mí.

Señor, escucha mi súplica y llena mi mente con tu sabiduría divina. Que mi corazón esté en paz y mi espíritu se fortalezca en tu presencia, para que pueda enfrentar este examen con confianza y serenidad.

Jesucristo, Salvador

Amado Jesús, Redentor de nuestras almas, encomiendo a Ti este examen que me inquieta. Tú que conoces el peso de la carga que llevo, te pido que intercedas por mí ante el Padre celestial. Que tu amor y tu gracia me acompañen en cada pregunta, en cada respuesta, y en cada momento de duda o temor.

Oh Jesús Misericordioso, ilumina mi mente con tu luz divina y fortalece mi espíritu con tu amor incondicional. Que tu presencia sea mi guía y mi consuelo en este momento de prueba.

El Espíritu Santo, Consolador

Espíritu Santo, fuego divino que todo lo renuevas, desciende sobre mí con tu gracia y tu paz. Inspírame en este examen, infunde en mí la calma y la claridad de pensamiento necesarias para superar este desafío con éxito. Que tu presencia sea mi consuelo en la incertidumbre y mi fuerza en la debilidad.

Oh Espíritu Santo, guía mis pensamientos y mis palabras para que reflejen tu verdad y tu bondad. Que mi espíritu esté en sintonía contigo, y que mi corazón sea receptivo a tu inspiración divina.

Mi fe, mi esperanza

En este momento de ansiedad y preocupación, me aferro a mi fe como mi ancla en medio de la tormenta. Confío en tu promesa de estar conmigo en todo momento, oh Dios, y en la certeza de que nada escapa a tu divina providencia. Mi esperanza está puesta en ti, y sé que con tu ayuda podré superar cualquier obstáculo que se interponga en mi camino.

Confiando en tu poder y en tu amor inagotable, me entrego a ti por completo, sabiendo que en tus manos está mi destino y mi futuro. Que mi fe sea inquebrantable y mi esperanza inamovible, confiando en que todo lo puedo en Cristo que me fortalece.